Desde el pasado 1 de julio de 2016 será obligatorio que el peso bruto de cada contenedor que se transporte por mar esté verificado. La OMI (Organización Marítima Mundial, IMO en inglés) ha actualizado el convenio SOLAS (Convenio sobre seguridad de la vida en el mar) y a partir de dicha fecha el embarcador estará obligado a obtener el peso bruto verificado de cada contenedor y comunicárselo a la naviera.
Para verificar el peso bruto, el contenedor precintado o bien cada paquete y artículo (incluidos pallets, maderas, embalajes, materiales de sujeción y la tara del propio contenedor) deben ser pesados siguiendo los estándares y requisitos del Estado en que se está realizando.
El incumplimiento o irregularidades en la comunicación de este peso bruto verificado puede suponer que el contenedor no sea cargado.
El capitán o su agente pueden solicitar un pesaje para comprobar que el peso bruto verificado coincide con el peso real; Si no son coincidentes se tomará com peso bruto verificado o VGM el obtenido por el capitán y será el que se use para la planificación de la estiba.
Cada país dispondrá las sanciones y penalizaciones derivadas del incumplimiento o irregularidades.
Es responsabilidad del embarcador verificar el peso de la carga, insistimos, incluyendo pallets y otros pesos así como la tara del contenedor; es decir, no sólo hay que tener en cuenta las propias mercancías ya que un exceso de peso puede suponer que el contenedor se quede en la terminal. La naviera no está obligada a hacer este pesaje y si un contenedor llega sin este requisito no podrá cargarlo en el buque.
El embarcador o cargador puede ser el vendedor o comprador de la carga, un transitario o un tercero que contrata el transporte marítimo. Es interesante tener un buen conocimiento de los INCOTERMS y condiciones que hemos aplicado a la hora de contratar el transporte de las mercancías para delimitar bien las responsabilidades y prevenir posibles problemas ante sanciones, seguros, incidentes… etc.
Este VGM se comunica junto a los otros documentos de transporte marítimo (Instrucción de embarque, solicitud de booking…) y se hará llegar a la naviera que a su vez lo comunicará a la Terminal. Los puertos poco a poco irán adaptando sistemas y formas electrónicas para facilitar este proceso.
La justificación de esta medida está en mejorar la seguridad en el transporte, ya que pequeñas desviaciones en el peso de cada una de las cargas pueden suponer problemas en la estiba de los buques y poner en peligro el transporte y las personas que trabajan en su desarrollo.
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